Pasó el ayer Camelias rojas muertas Nada existe

Pensamientos y reflexiones del día a día
Pasó el ayer Camelias rojas muertas Nada existe
Desconfío de aquellos autores, músicos, escritores que, escribiendo ficción, dicen no escribir sobre su propia vida. Al escribir, uno se va enredando en sus propios recuerdos y aparecen entremezclados en la obra. Es muy difícil que todo lo que cuentas le pase sólo a tus personajes. Detalles, pequeños gestos, lugares, contaminan lo que sale de tus manos y no puedes separarte de tus propias experiencias. A mí también me suele pasar. Por eso, en un momento dado, decidí escribir directamente sobre lo pensado y vivido en este planeta, en este viaje. O tal vez, el miedo a desaparecer sin dejar rastro, hizo que me decidiera a abrir la caja de mis recuerdos para contar sin filtro, instantes de un tiempo que no volverá. Ver más entradas
La memoria del amor es capaz de vencer a la propia muerte. Mientras seas recordado, Kurt, no desaparecerás. Un haiku para ti en este día
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