El “supremacismo” es una creencia que sostiene que las personas de cierta etnia, y en este caso hablamos de la raza blanca, son superiores, en muchos aspectos, a las personas de otras etnias y que, por lo tanto, los blancos deben dominar a los demás ¿Os suena de algo?
El supremacismo racial tuvo su momento tal vez más tristemente importante en la doctrina nazi y sus consecuencias durante la II Guerra Mundial. Los miles de muertos, los campos de concentración, los estragos que ocasionó, conforman el horror de una realidad.
Pero el virus racista no nació en esa época, tiene más que ver con el uso del poder, que con el color de piel de las víctimas y los verdugos. ¿Y qué pasa en nuestros días? ¿Hay un aumento considerable de estas creencias? ¿Hay promotores conocidos o no tanto, de ellas?
Se señala a un canal de gran audiencia y de contenidos aparentemente inocentes sobre historia y arqueología como uno de los mayores difusores de esta clase de ideas: el “History Channel”, poniendo el ejemplo de documentales concretos en los que se distorsiona la versión oficial de la colonización de América, se utiliza la “arqueología especulativa” para enfatizar las sospechas sobre la construcción de las pirámides por los egipcios, la creación de las líneas de Nazca por seres extraterrestres o programas en los que los invitados ensalzan a sociedades secretas como los “Caballeros del Círculo Dorado”, una organización de sureños ricos que pugnaron por la creación de un imperio esclavista panamericano.
“Estos programas del History Channel sirven como punto de partida para ideas que desacreditan la tecnología y los conocimientos necesarios para construir tales proyectos arquitectónicos, dirigiendo a los espectadores hacia fuentes pseudocientíficas», asegura Jason Colavito, autor del libro ‘Foundations of Atlantis, Ancient Astronauts and Other Alternative Pasts’, el cual explora muchas de las ideas sobre la “arqueología especulativa” difundidas por grandes medios de comunicación líderes de audiencia. «La idea de que los extraterrestres construyeron las pirámides deja de ser divertida cuando atrae a jóvenes a sitios web en los que rápidamente se pasa del tema OVNI a los judíos».
Sin embargo, ninguno de los argumentos que se escuchan en documentales especulativos, vídeos de YouTube de dudosa credibilidad científica y conversaciones cotidianas en las que emergen esta clase de temas, se aplican a las grandes construcciones de la Antigua Grecia o el Imperio Romano, de los que no se duda que fueron obra de los humanos.
Pero claro, aquellos que marcaron el punto de inicio del desarrollo de la cultura occidental, habitaban zonas europeas a orillas del Mar Mediterráneo, como Roma o Grecia. A la hora de hablar de lugares y épocas como la Antigua Grecia o el Imperio Romano y sus también majestuosas edificaciones, descubrimientos e inventos en los campos del derecho o la ciencia, los relatos son protagonizados por orgullosos emperadores que conquistaron lo inconquistable, reunieron los ejércitos más numerosos de la historia y gobernaron con mano de hierro en nombre de dioses apolíneos y seres mitológicos.
La “arqueología especulativa” contribuye al descrédito de comunidades negras e indígenas al negar su historia y atribuirla a continentes míticos como la Atlántida o incluso, a extraterrestres.Los supremacistas blancos utilizan ese negacionismo para reescribir la historia con el objetivo de reforzar sus propios sistemas de poder.




